Nos guste o no nos guste, está claro que no todo el mundo tiene que llevarse bien. Y hay mucha gente que tiene rivales o enemigos, pero eso no es que sea necesariamente algo malo. En muchas ocasiones tener un rival o un enemigo, según sea el caso, puede ayudarte a mejorar mucho en tus actividades, ya sea en el trabajo o en tu vida fuera del trabajo.

Aunque lo más normal es pensar que alguien que te está molestando, no puede tener nada de provecho para ti y mucha gente les desea lo peor a sus enemigos, como un cancer recto o algo así, pero la verdad es que están equivocados. Puede que sus rivales no les gusten pero tampoco es como para desearles una enfermedad peligrosa.

 

En muchas series, aunque sé que son series de ficción, los protagonistas nunca conseguirían sus metas y sueños si no fuese por la colaboración directa o indirecta de sus rivales o de sus enemigos, todo está muy entrelazado. Pero en la vida real la gente que suele tener enemigos es por algo, y normalmente suele ser por culpa de su forma de ser o de su carácter. Si eres una persona buena con todo el mundo que te rodea no les estás dando ningún motivo para que nadie se enfade contigo, de ese modo nunca tendrás un enemigo. Aunque en ocasiones es la propia envidia de los demás lo que te provoca tener enemigos, y eso es algo que nadie puede evitar.

 

En mi vida sí que he tenido algún enemigo, pero casi todos ellos han sido sin ninguna clase de provocación por mi parte, casi siempre han sido por celos de mi forma de ser, ya que normalmente hago lo que me apetece y cuando quiero, y eso es algo que no a todo el mundo le parece demasiado bien, pero eso es porque ellos no pueden hacer lo que quieran siempre, es su problema. Personalmente, no me voy a molestar en absoluto, dado que yo no he hecho nada malo, y voy a seguir teniendo mi misma forma de vida aunque al resto del mundo le moleste.