De buena fe
Todos nos merecemos una segunda oportunidad. Es de sentido común. Equivocarse es siempre una posibilidad y no deberíamos quedar para siempre arruinados por un error. Pero sucede muchas veces. Para ello se elaboró la ley de la segunda oportunidad, un texto jurídico que permite a determinadas personas cancelar sus deudas si se cumplen una serie de requisitos. ¿Y cuáles son esos requisitos? Ahí es donde debe entrar el conocimiento pormenorizado de la ley. Porque, de base, ya desde su propio…