Sombrillas vs Toldos
Si tienes un establecimiento hostelero, posiblemente te plantees si poner un toldo o sombrillas para tu terraza. Veamos las ventajas y los inconvenientes de ambos sistemas.
El toldo es muy cómodo cuando se trata de una terraza de pequeño tamaño y que está pegada a la fachada del bar. Esto tiene que ser necesariamente así porque el toldo tiene que anclarse en la pared y extenderse para cubrir la zona de mesas. Por tanto, estas no puede tener separación respecto al local.
Si el local es el bajo de un edificio con más viviendas, habrá que comprobar si los estatutos comunitarios permiten colocar el toldo y las características de este, ya que no siempre va a ser así.
En el caso de cumplir con los requisitos de autorización de la comunidad y del tamaño y situación de la terraza, el toldo tiene la ventaja de que se puede extender y quitar fácilmente, por lo que la terraza se monta y se desmonta mucho más rápido que si ha sillas, mesas y también sombrillas. Pero hay que tener en cuenta que solo es viable en estos casos.
La sombrilla bar cuenta con el inconveniente de que hay que recogerlas si se tiene que recoger la terraza al completo cada día. Esto sucede en zonas en las que la ordenanza municipal así lo impone pero también en lugares de marcha en los que, si no se recogen los artículos de la terraza, pueden acabar destrozados.
Pero si tienes una terraza fija que utilices de forma continuada todo el año, las sombrillas tienen muchas ventajas, especialmente si son grandes y de calidad. Las de formas cuadradas o rectangulares pueden unirse entre sí hasta cubrir toda la superficie de mesas, por lo que actúan como un gran toldo que no solo da sombra, también protege de la lluvia e incluso dan una cierta intimidad.
Otra de las ventajas de las sombrillas es que la terraza puede estar alejada de la fachada del establecimiento, por ejemplo en una plaza cercana o en una zona de la acera pública separada de la entrada de portales y escaparates. La distancia no es un problema porque las puedes colocar en dónde quieras.
Además, las sombrillas se adaptan a todos los tamaños y formas de la terraza. Y, en el caso de sufrir un daño, no hay que cambiar la totalidad de las mismas, como ocurre con el toldo, sino que basta con cambiar la que se ha deteriorado.