¿Qué se lleva en los trajes de comunión de niña?
Cuando vamos a comprar vestidos comunión para niñas solemos encontrarnos con un pequeño problema. Concretamente, con un pequeño problema de ocho años que se ha hecho a la idea de que ese día se va a vestir de princesa. Por eso, hay que elegir un vestido que la haga sentir especial pero a la vez, hay que tratar de que la niña no se vea exagerada o, como sucede en algunos casos, convertida en una novia en miniatura. Conseguir este equilibrio entre lo que la niña suele querer y lo que es realmente un traje de comunión es más fácil de lo que parece.
Los vestidos de corte imperio son perfectos para las niñas porque les permiten estar cómodas y a la vez elegantes. Las mangas abullonadas son tendencia y combinan muy bien con este corte clásico. El blanco del vestido puede romperse con un lazo ancho a la altura del corte del vestido en un tono rosa o en cualquier tonalidad pastel. Un tocado ligero, con algunas flores en el mismo tono que el lazo, le dará ese toque de princesa que le gustará a la niña, sin dejar de ser un vestido infantil acorde a su edad.
Si se le quiere dar un poco de volumen a la falda se puede elegir un vestido con corte a la cintura y con un cancan suave, que aporte vuelo pero de una manera natural. La parte superior del vestido puede tener algún bordado que le aporte color o incluso una cintura ancha que imite a las lazadas pero realizada en tela con un material que contraste. La manga corta o por el codo son las dos opciones más elegidas. Se debe de evitar el tirante o los hombros a descubierto ya que se trata de un acto religioso.
Aunque el color blanco es el más escogido, los tonos beige o un rosa nude también pueden ser buenas opciones. Incluso la falda blanca y la parte superior del vestido en algún tono suave puede ser una elección acertada, actual y bonita, sobre todo si le gustan a la niña. Porque no hay que olvidar que ella es la protagonista del acontecimiento.
Las diademas con flores son tendencia desde hace años y son muy prácticas porque resultan cómodas y bonitas. Las bailarinas o los zapatos estilo merceditas son otras opciones clásicas que no pasan de moda.