- Reutiliza la ropa de comunion con diferentes complementos. Si tienes más de un niño o niña, puedes reutilizar la ropa de comunión del mayor en el pequeño cambiando todos los complementos. El vestido se verá totalmente diferente y parecerá que se está estrenando un modelo nuevo. Cuanto más distintos sean los complementos, más se conseguirá la ilusión de estar estrenando un traje, especialmente si se tiene maña para realizar alguna adaptación de costura. Este truco también sirve con los trajes de primos.
- Compra ropa de segunda mano. Si no tienes a nadie en la familia que pueda pasarte la ropa siempre te queda la opción de comprar de segunda mano. Como son prendas que se utilizan solamente un día, muchas personas las venden absolutamente impecables y solo tienes que elegir las que sean de tu gusto y talla. Puedes comprar el conjunto completo o puedes comprar solo el traje o el vestido y adquirir los complementos por separado. El ahorro puede ser muy importante y la ropa puede ser totalmente de temporada. En grandes ciudades existe también la opción de alquilar este tipo de ropa para un solo día.
- Adquiere ropa de comunión de outlet. Todas las marcas importantes tienen sección de outlet con vestidos y ropa que son nuevos, pero de temporadas anteriores y que, por tanto, tienen que tener un descuento respecto a la ropa de la última colección. Puedes combinar este tipo de prendas con complementos muy actuales para que se vean totalmente auténticas y tu hijo o hija vaya ideal y con prendas nuevas que estrena, pero ahorrando algo de dinero.
- Compra ropa nueva y véndela luego de segunda mano. Es una forma de que tu hijo o tu hija estrene realmente su ropa de comunión de temporada, yendo a la última, pero recuperando luego una parte del dinero. Una vez que pase el día, solo hay que llevar la ropa a la tintorería y reparar si es necesario alguna costura. A continuación, se anuncia en una página especializada de ropa de segunda mano y se pone a la venta. También en páginas de venta de segunda mano en general. Si se pone a buen precio se puede vender pronto, sobre todo si la comunión ha sido a principio de temporada, porque todavía habrá posibilidades de venderla para ese año.