40 años de servicio
Parece que fue ayer cuando mi padre compró un camión refrigerado y se estableció por su cuenta. Había trabajado varios años en una empresa especializada en distribución de productos congelados para restauración y hostelería, pero decidió que no merecía la pena seguir siendo un empleado, que podía encargarse él mismo de dar ese servicio tratando con algunos de sus clientes de confianza. En un principio, trabajó sirviendo pescados y mariscos directamente a restaurantes. Pero, a poco a poco, el negocio fue floreciendo.
Desde que se lanzó en solitario, entendió que lo más importante era asegurar un servicio rápido y de calidad. Así, era conocido, por ejemplo, como el mejor distribuidor de navajas congeladas en la zona debido a los contactos que tenía entre los productores, pero también por la rapidez con la que podía cumplir con un pedido urgente. No obstante, en la mayoría de casos sus clientes hacían pedidos periódicos de forma, que, cada mes, por ejemplo, les llevaba un determinado número de productos que podía variar ligeramente al alza o a la baja dependiendo de sus necesidades.
Tres años después de establecerse en solitario, comprendió que el negocio iba demasiado bien para no aprovechar la oportunidad de dejar de ser un distribuidor autónomo y fundar una empresa. Hacía tiempo que había tenido que rechazar algunos clientes y grandes pedidos porque con un solo camión ya no daba abasto. Así fue como empezó la expansión con la compra de un segundo camión, y al alquiler de una nave comercial de mayor tamaño. La empresa había nacido.
Pronto nos incorporamos mi hermana y yo, ambos en labores administrativas y de atención al cliente. Un poco de chicos para todo siempre con la confianza (y la dificultad) que conlleva que el jefe sea tu padre. La empresa ya no solo era conocida como el mejor distribuidor de navajas congeladas, sino que abordaba todo tipo de pescados y mariscos, pero también carnes, helados, etc. De hecho, firmamos un acuerdo muy importante con una conocida empresa de helados que nos dio un fuerte empujón que nos ha llevado, 40 años después, a ser toda una referencia.